En el blanco Fernando Zepeda H.

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*Rocha Moya manda mensajes como “si ya la hubiera librado”
*Promueve aspirantes a sucederlo que más bien parecen “cortinas de humo”
*Lo cierto es que los casos Zambada y el homicidio de Cuen, aún están vigentes y en medio de ellos está el nombre del Gobernador
*La “guerra” entre “chapitos” y “mayos” se extiende a Durango. Van dos comunidades que son bombardeadas desde aeronaves
*La alcaldesa Estrella Palacios acaba de tomar una buena decisión: Ratificó como titular de Cultura a Raúl Rico González, una institución en cultura y organización del carnaval
*La mala es que la alcaldesa ratificó al gerente de Jumapam, organismo que desde hace meses dejó de ser supervisado por el Ayuntamiento
*Para el exalcalde de Mazatlán Jorge Rodríguez Pasos, la historia no termina. Sus dos hijas que sustrajo ya se encuentran con su madre, pero él continúa grave en el Hospital
*El destino de Ricardo Velarde y de Edgar González corre paralelamente. Se definirá hasta después de que el Gobernador rinda su tercer informe

¿Ya la libró Rocha Moya?. Pareciera que la estrategia del Gobernador es cambiar la narrativa. Lanzar cortinas de humo y sobre todo intentar enviar un mensaje de que políticamente él está bien y hasta sobrado para nombrar a su relevo. El arranque de lo que parece una estrategia política (la de seguridad está en manos de los militares), el Gobernador Rubén Rocha Moya “destapo” a su ahijado Juan de Dios Gámez en el mismísimo acto en el que rindió protesta como Alcalde de Culiacán. Puesto que venía desempeñando tras el “desafuero” de Jesús Estrada Ferreiro. Después el Gobernador se fue a Ahome. Allá hizo lo mismo con Gerardo Vargas Landeros en el acto de toma de protesta, al asumir por segunda ocasión consecutiva la alcaldía de Ahome. Luego vino a Mazatlán a la asunción como alcaldesa de la hija de su compadre Renato Palacios, la joven Estrella Palacios que asumió la alcaldía del puerto. Pero aquí no hubo “destape”. En estos actos estuvieron presentes los senadores Imelda Castro y Enrique Inzunza, ambos por lógica elemental por sus cargos, aspirantes a relevar a Rocha Moya. Imelda Castro no forma parte del equipo y menos está en los quereres del Gobernador.

En cambio, Enrique Inzunza es desde que inicio el sexenio rochista, el señalado para sucederlo claro está con el respaldo y complacencia del Gobernador. Pero pese al aparente entusiasmo de Rocha Moya, lo cierto es que el panorama político aún no luce despejado. Oficialmente la Fiscalía General de la República no ha concluido la investigación del aparente “secuestro” de Ismael Zambada. Y tampoco el asesinato del exrector de la UAS Melesio Cuen. En ambos casos Rocha Moya es mencionado. Podrá tal vez disfrutar los buñuelos, pero para enero podría darse la comparecencia de Ismael Zambada en tribunales de Estados Unidos y lo que surja pueda traer consecuencias para Sinaloa.

En el asesinato de Melesio Cuen, probado está que el Estado a través de la Fiscalía de Sinaloa intentó desviar la investigación y lanzó un video que resultó un montaje. Funcionarios de la Fiscalía estatal están como sospechosos ante la FGR. Estos hechos provocaron la “renuncia” de la anterior fiscal Sara Bruna Quiñonez. Pero hay otros funcionarios de esa dependencia que están bajo investigación. Hasta la actual Fiscal Claudia Zulema Sánchez Kondo, que fungía como Vicefiscal en la zona centro la fecha de los sucesos. Hacer sentir que todo ya está bien, es para el Gobernador un riesgo. Y presumirlo mucho mayor.

Guerra se extiende a Durango. Era cuestión de tiempo. Y ya les llegó. La guerra entre “chapitos” y “mayos” se extendió de Sinaloa a Durango. Las incursiones violentas llegaron por aire. En la comunidad de Tamazula, en Durango, una avioneta lanzó explosivos que buscaban impactar los caseríos.

Supuestamente esta zona es por donde operaba y ocasionalmente se ocultaba Ismael Zambada. Días antes el 28 de octubre se reportó el primer ataque aéreo en Durango. Este fue contra los habitantes de la comunidad de Vocogil, del municipio de Santiago Papasquiaro ubicado en la zona serrana de Durango, parte del considerado “Triángulo Dorado” que forman los limites de Sinaloa, Chihuahua y Durango. La guerra sigue. Aunque en ocasiones con baja intensidad. Pero aquí está.

Una buena. La alcaldesa de Mazatlán Estrella Palacios tomó una buena decisión. Ratificó como titular de Cultura a Raúl Rico González. Es sin duda una decisión acertada. Rico González se ha convertido en toda una institución en materia de conducir los destinos de los programas culturales de Mazatlán.

Pero más el evento de mayor relevancia para Mazatlán como es la celebración de Carnaval. Palacios sabe perfectamente la relevancia que tiene la fiesta de Carnaval. Y por fortuna decidió que Raúl Rico González continúe en el cargo.

Y otra mala. La nueva alcaldesa Estrella Palacios debe estar enterada de lo que sucede en la Junta Municipal de Agua Potable de Mazatlán. Por lo que debió de haber revisado más el tema antes de ratificar al Consejo de esa junta y evaluar lo conveniente que es que cambien el estado de cosas. Palacios estuvo ayer en el Consejo de la Jumapam y ahí mismo se ratificó al mismo. El Gerente Jorge Guadalupe González Naranjo continuará.

Pero Estrella Palacios debería de estar enterada que el manejo de esa paramunicipal desde hace tiempo quedó fuera de la esfera del Ayuntamiento. Ni el Presidente Municipal anterior pudo participar en las decisiones de la Jumapam. Desde hace muchos meses, la Jumapam se ha manejado en forma “autónoma”, sin permitir la injerencia de la Presidencia. Y si ahora la nueva alcaldesa ratifica al Consejo y su gerente, lo que quiere decir es que las cosas seguirán iguales. Que ella no tendrá ninguna autoridad sobre las decisiones que se tomen en la Jumapam, menos en la fiscalización de los recursos que maneja esa junta.

La historia no termina. Mientras el exalcalde Jorge Rodríguez Pasos se debate entre la vida y la muerte en el Hospital Genera de Mazatlán, la exesposa de él, Guadalupe Valle celebró que sus dos hijas menores de edad que habían sido sustraídas, ya se encuentran sanas y salvas con ella. La vida de constantes escándalos en los que se ha visto involucrado Rodríguez Pasos pareciera no tener fin. Primero como Alcalde en funciones que fue denunciado por su anterior esposa Consuelo Olivas de agresiones físicas. Una de ellas que la llevó a ser hospitalizada.

A eso le siguió el escandalo del desafuero. Y pasando por intentos frustrados de regresar a la política, llegó otra denuncia. Ahora de la que fuera su segunda esposa Guadalupe Valle quien lo acusó de agresiones físicas y posteriormente de sustraer en forma ilegal a dos de sus hijas menores. Tuvieron que pasar cuatro años para que las niñas regresaran con su mamá. Y tuvo que suceder que Rodríguez Pasos se enfermera gravemente y llegara así al Hospital General de Mazatlán en donde hasta estos momentos se encuentra hospitalizado. El reporte médico es que su estado de salud es bastante grave.

Hasta después del informe. El destino y futuro de Ricardo Velarde y tal vez de Edgar González tendrá que esperar hasta después del tercer informe de gobierno del Gobernador Rubén Rocha Moya. Velarde actualmente encargado de la Secretaria de Turismo, tras la renuncia de Estrella Palacios y Edgar González luego de concluir su encargo como Alcalde de Mazatlán, están en la espera de la decisión que tome Rocha Moya.

Parece que todo está ligado a la renuncia de Javier Gaxiola Coppel a la Secretaria de Economía. Renuncia que ya presentó pero que será efectiva luego del tercer informe. Los espacios para Velarde y González ya se han reducido. Y aún cuando hay quienes afirman que “ellos ya saben”, la decisión oficialmente puede cambiar.