*Nos recuerda que “aquí hasta un pobre se siente…”
Verónico, un hombre de 72 años, alegre, con las mejores vibras, vendedor en un puesto semifijo en la plaza Sánchez Taboada, bendice a Mazatlán por su turismo, por su economía, por su gente, y lo señala como un lugar paradisiaco.
Muy bailador, afirma ser el “Hombre del Sombrerón” y sin música de por medio se pone a danzar a las 12 horas, el mediodía, ante la mirada de algunos turistas que bajaron del Royal Princess, uno de los 18 cruceros que arribarán en este invernal noviembre en la ruta de fin de año.
Pero no sólo sorprende por su contagioso ánimo por la vida, sino porque afirma que la ciudad y puerto es único y casi rememora la frase del compositor José Alfredo Jiménez en su “Corrido a Mazatlán” de que …”aquí hasta un pobre se siente millonario”.
Sorprende también porque es poliglota, al menos eso aparenta, y nos habla en francés e inglés, claro además del español.
El “Hombre del Sombrerón” no se achica ante la evidente baja en el turismo y para él la situación que se vive es fortuita y no queda otra más que echarle ganas a la vida, al trabajo y que vienen tiempos mejores para Mazatlán.
Y, sin rubor alguno, se arranca de nuevo en su “bailongo” el “Viejo del Sombrerón” ante la cámara de Sinaloa en Línea.