-El poco saber no debe dar miedo, el valor, el respeto y la humildad; son parte de una llave para abrir las puertas del mundo
-Este año será objeto de un reconocimiento por sus 50 años de trayectoria
Próximo a cumplir 80 años, el empresario restaurantero, don Ángel Cruz Tirado, es un ejemplo de que a cualquier edad se pueden hacer las cosas. Un hombre que sin saber leer y escribir, llego a Mazatlán, procedente de si tierra natal, Santa Catarina, Concordia, y se adentró en las actividades del turismo, trabajando en hoteles, restaurantes, taquerías, hasta llegar a tener su propios negocios, los cuales hoy se siguen expandiendo.
Hoy en día con la mira puesta en abrir un nuevo restaurante, ahora estilo campirano, por los rumbos de Villa Unión y El Roble, donde hasta una plaza de Toros, contempla edificar; el fundador de la Costa Marinera, este año será objeto de un reconocimiento por sus 50 años de trayectoria, el cual estará a cargo de Canirac Mazatlán.
Con ganas de crecer, se puso a estudiar en la escuela nocturna del Seguro Social, aprendiendo lo básico, después estudió inglés; pero su mejor escuela ha sido la vida, siempre aplicando su máxima, dar siempre lo mejor de sí para crecer en los negocios, donde para él la comunicación es la base para hacer las cosas bien, donde sobresale ofrecer un buen servicio, que los clientes se vayan satisfecho, y algo primordial que los empleados estén contentos, para así crecer todos.
Conocido por ser un gran promotor turístico y de la gastronomía, lo cual lo ha llevado a pisar escenarios nacionales e internacionales, de la mano de artistas, como Gonzalo Vega, Verónica Castro, José Ángel Ferrusquilla, Antonio Aguilar, entre otros, poniendo en alto el nombre de Mazatlán.