A sus 77 años nunca se imaginó que pagaría por un crimen que cometió hace más de tres décadas, Ezequiel ‘N’, integrante del extinto Cártel de Guadalajara, fue detenido días atrás por estar presuntamente relacionado en el secuestro y homicidio del agente de la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA), Enrique ‘Kiki’ Camarena.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), compartió con autoridades mexicanas la orden de aprehensión del ciudadano estadounidense por su participación en el crimen del funcionario americano.
En 1985 una investigación emprendida por Camarena originó que se cimbrara la estructura de la organización criminal liderada por Rafael Caro Quintero, Ernesto Fonseca y Miguel Ángel Félix Gallardo; al ser descubierto el agente se dice que los capos ordenaron su muerte.
Kiki fue privado de su libertad junto al piloto Jesús Alfredo Avelar y llevados ante los jefes para matarlos.
La investigación emprendida por las autoridades mexicanas determinaron que Caro Quintero era responsable de los delitos de privación ilegal de la libertad, en la modalidad de secuestro y de homicidio calificado.
Pero en 2013 el Primer Tribunal Colegiado en Materia Penal de Jalisco determinó que Rafael Caro Quintero no debió ser enjuiciado en el fuero federal por el asesinato del agente de la DEA, Enrique Camarena Salazar, crimen cometido en febrero de 1985, en Guadalajara, Jalisco, sino en el fuero común, ya que no se trataba de un diplomático ni de un integrante consular.
Las autoridades de Jalisco resolvieron que con respecto a los asuntos de narcotráfico de que se le acusó ya cumplió la condena, por lo que ordenó su libertad de manera inmediata.
Las autoridades del país vecino siguen buscando a Caro y otros responsables de la muerte del agente; Ezequiel también fue acusado de matar a dos estadounidenses que confundió como agentes.
Con información de El Universal