Edgar, Oficio y Disciplina Cinismo del Presidente Intelectuales y Violencia

0
109

Edgar, Oficio y Disciplina

Edgar Augusto González Zatarain, como algunos políticos experimentados de Morena, saben de los tiempos políticos y electorales; no van al exhibicionismo ni a tronar cohetes antes de tiempo; la disciplina partidista ante todo y sabedores que el trabajo, en este caso al frente de la comuna de Mazatlán, lo pueden llevar a nuevos estadios políticos y administrativos.

No hay prisa, lo que será, será. Por eso se le ve tranquilo, trabajando como desde el primer día que llegó a tomar las riendas del Ayuntamiento.

La impaciencia de algunos “morenos” mostraron su decepción ante la lista de precandidatos a cargos de elección popular que ya circulan a nivel en el Consejo Nacional de Morena y en las redes sociales. Hay preguntas quizás, como en el distrito federal 01 en donde Morena propone a la secretaria de Educación Estatal, Graciela Domínguez, como su precandidata a diputada, pero el legislador federal y dirigente en Sinaloa del PT, Leobardo Alcántara, sienten esa diputación federal como “suya”, aunque todavía no hay elecciones constitucionales.

Pero en el caso de Edgar Augusto se mostró tranquilo después de registrarse como aspirante a la alcaldía mazatleca, al igual que otra quincena de “morenos”, entre ellos Estrella Palacios, secretaria estatal de Turismo y el ex priista Fernando Pucheta, pero el “palomeo” recayó en Estrella que en las encuestas la dan muy bajo de las simpatías electorales, sin embargo aquí parece estar operando la equidad de género salvo que reculen en los otros Ayuntamientos, también importantes y con alta densidad poblacional como es la capital, Culiacán, y Ahome, Los Mochis, donde van en esa famosa lista Juan de Dios Mendívil y Gerardo Vargas Landeros, respectivamente.

González Zatarain, el ex alcalde del Rosario, ahora presidente municipal interino de Mazatlán quiere ir a las urnas y ratificar la legitimidad de alcalde que ya ganó en el ejercicio del poder, primero como secretario del Ayuntamiento y ahora como presidente en funciones después de la caída de Luis Guillermo Benítez Torres, quien dejó un desastre de municipio y, precisamente, Edgar González niveló el barco, sobre todo en el desaseo en las arcas municipales.

Esta mañana comentó en corto con uno de nuestros reporteros que la decisión definitiva no está tomada y todo puede suceder en las altas esferas del poder en donde preocupa no sólo seguir en la Presidencia de la República, sino con buenos candidatos de arrastre y arraigo ganar el mayor número de diputaciones federales para tener mayoría legislativa en el Congreso de la Unión, así como el mayor número de senadores. Lo mismo en los estados donde habrá relevo de alcaldías y Congreso Estatal, como es el caso de Mazatlán.

A los “morenos” no les conviene fracturarse ni dividirse con malas decisiones políticas y perder el poder que durante 18 años busco el ahora Presidente de la República.

Todo esto debe de influir para tener los mejores candidatos y no impuestos por decisiones cupulares; Morena debe demostrar, sobre todo ahora, que no son iguales. La próxima semana habrá decisiones importantes en el partido de la 4T; estaremos pendientes.

Cinismo del Presidente

Lo advirtió hace unas horas en este portal el columnista Fernando Zepeda con palabras de la precandidata presidencial Xóchitl Gálvez de los “riesgos de una elección del Estado” en donde el Presidente de la República quiera arrebatar la elección presidencial del 2 de junio próximo en caso de que su candidata Claudia Sheinbaum esté ante la posible derrota.

Desde este portal ahora advertimos el crecimiento imparable de la violencia con más de 176 mil asesinatos violetos en el país todavía y en donde el Primer Mandatario pretende revertir su fracaso en la estrategia de “abrazos, no balazos”, echando la culpa al pasado de que se trata de “propaganda” por parte de sus adversarios y de los medios de comunicación.

Lo preocupante es esa “elección de Estado” y esa violencia que tiene tomado a México y que puede usarse en las elecciones para infundir miedo en los electores y los actores políticos.

El Presidente de México una vez más justifica los actos del crimen organizado y dice que su objetivo es: “Crear un ambiente de miedo, de temor, que es ingobernable el país. No es cierto, es propagandístico; yo no sé si haya conexión o haya mano negra, si se haya articulado, de lo que no tengo duda es que nuestros opositores, sí ayudan en la propaganda negra”, subrayó.

Lo acabamos de ver en Sinaloa, principalmente en la capital: Culiacán con los festejos de año nuevo y en donde la delincuencia organizada mandaron el mensaje que “siguen aquí” y no van a dejar la plaza, sea territorio “Chapo” o Zambada. La lluvia de balas mató e hirió a personas y más de 150 cámaras de video destruidas en una operación simultánea y en donde las “fuerzas del orden” no tuvieron ningún detenido.
En varios estados de la República el crimen organizado tomó las calles y ha dejado un reguero de muerte, sea en balaceras o usando drones en Guerrero y Michoacán. Nunca antes nuestro país estaba tan amenazado por el crimen. Este año electoral es fundamental que el país tenga paz y no violencia. En elecciones federales intermedias y en las locales en Sinaloa y los 18 municipios hubo violencia electoral.

Incluso, en otros datos y desde la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del INEGI se publica que el 62.3% de personas en México se sienten inseguros en su ciudad. Los cajeros automáticos en vía pública tienen el mayor porcentaje entre los espacios físicos donde la población percibió más inseguridad (73%); le siguieron el transporte público con 65.5%; el banco, con 57.3% y las carreteras, con 51.6 por ciento.
Causa en Común, organización de la sociedad civil, informó que durante 2023 contabilizó 427 masacres que fueron registradas en medios de comunicación de México. Acumulando 2,130 desde el 1 de enero de 2020 al 16 de diciembre de 2023. Causa en Común advierte que “cada 19 horas se comete una masacre en México”.

Fue promesa vana del Presidente de la República de pacificar el país y, por el contrario, la violencia aumenta con el riesgo de influir en los comicios electorales.

El cinismo del Mandatario no tiene límites, si no pregúntenle a las madres “rastreadoras” del “borrón y cuenta nueva” del Presidente al padrón de desparecidos en el país. Sin palabras… Seguimos.

 

Intelectuales y Violencia

Y aunque no queramos hablar de la violencia en nuestro cotidiano mundo y esfera sinaloense ahí están los hombres de letras para, desde un ámbito distinto reconocer que hay distintos tipos de violencia y pretender minimizar que el país no ha pasado por etapas de barbaridades.

Encontrar la verdad sobre la violencia es la parte más compleja ante un crimen en cualquier sociedad y es una pregunta que resulta muy difícil responder, dice de entrada el comunicado del gobierno del estado de Sinaloa ante las palabras expresadas por el académico Pablo Piccato, durante la conferencia y presentación de su libro «Historia mínima de la violencia en México», organizada por la Subsecretaría de Derechos Humanos de Gobierno del Estado.

El evento tuvo como comentarista principal de al reconocido escritor Elmer Mendoza Valenzuela, además de Juan Salvador Avilés Ochoa, Director del Instituto Sinaloense de la Cultura, quién dio la introducción correspondiente.

Piccato, es calificado como un referente internacional en materia del estudio de la violencia y la construcción social de México a través de sus diferentes etapas.

«La idea del libro era mostrar que la violencia no es un aspecto esencial de México, que no hay una violencia mexicana como mucha gente dice. Esta idea de que los mexicanos son violentos es un invento de algunos escritores, esta idea de que hay una identidad mexicana que está construida alrededor de la violencia, eso es falso, en mi opinión y la forma de probarlo es mostrando que la violencia ocurre en distintos momentos, por distintas razones y de distintas maneras, es decir, que no es una sola historia, sino que son varios capítulos de distintos tipos de violencia», apuntó Piccato.

«Este libro, recorre su historia, empezando por la violencia revolucionaria, explora la agraria, la religiosa, la pistoleril y la de guerrilleros y represores y la del crimen organizado, para finalizar con la de género. Cada una de estas violencias tiene sus propias reglas y justificaciones, aunque las unen varios factores como el acceso a las armas, la incapacidad del Estado para garantizar la justicia y la facilidad con la que algunos agentes utilizaron la fuerza extra legal, es un libro para leer, es un libro para comprender», destacó la Subsecretaria de Derechos Humanos, Patricia Figueroa Sauceda.

Por su lado, Elmer Mendoza Valenzuela realizó un brillante análisis de los movimientos sociales violentos que han configurado la historia contemporánea de México y que fueron la inspiración de este escrito.