Ahora sí veremos resultados: Rocha; la descuenización de la UAS; vicefiscalía especializada ¿servirá?
FRANCISCO CHIQUETE
Después de tanto, como dice el viejo bolero, Omar García Harfuch regresó al estado al que lo mandaron a vivir mientras conseguía la pacificación. Volvió a Culiacán, fuera de programa y acompañado del secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla Trejo.
Al final del encuentro, el gobernador Rubén Rocha Moya dijo visiblemente satisfecho que ahora sí los sinaloenses veremos resultados en la lucha por la pacificación. Su entusiasmo está basado en los compromisos que ambos funcionarios hicieron, con un nuevo programa o mejor dicho, un nuevo reforzamiento del programa de combate a la delincuencia organizada.
Hace tiempo que el gobernador no abordaba el tema o por lo menos no lo hacía con ese énfasis. Parecen haber quedado atrás los tiempos en que cada comentario suyo era respondido con improperios y con anuncios a veces delirantes de que sería destituido y hasta encausado.
De entrada, insistió en el optimismo que frecuentemente se desmiente a sí mismo: ya se está haciendo (la pacificación) porque en Sinaloa hay otras condiciones y la estrategia implementada ha permitido avanzar.
Apenas el fin de semana anterior nuestro estado fue escenario de veinticuatro ejecuciones, además de incontables delitos de alto impacto, que fueron desde las balaceras contra domicilios habitados o deshabitados, los robos de vehículos con lujo de violencia y la desaparición forzada de más sinaloenses.
Al cumplirse nueve meses de la guerra interna del Cártel de Sinaloa, los resultados han sido escandalosos: mil 450 asesinatos, entre los que se cuentan 43 menores de edad víctimas de la matanza; mil 540 desaparecidos; 33 policías asesinados, ocho militares muertos en agresiones o en enfrentamientos; 97 casas baleadas (sin contar las de esta semana); tres mil 810 vehículos robados con violencia, y una cantidad no precisada de heridos.
No son datos que inventen los conservadores o los enemigos del régimen, ni Loret de Mola o Mexicanos contra la corrupción. Son cifras oficiales, registradas en la Fiscalía General del Estado y en todas las dependencias que participan en la mesa de seguridad que se lleva a cabo diariamente.
¿Qué va a pasar que detenga este nivel de agresividad? “Vamos a fortalecer en elementos tanto de investigación, como de la Guardia Nacional, el Ejército, la Policía Estatal para efecto de reducir los delitos de alto impacto. Ahora sí ya se está haciendo, en estos momentos se viven otras condiciones, hemos avanzado mucho”, dijo Rocha.
Además de eso, se refirió a la instalación de videocámaras en sectores específicos y prioritarios.
El optimismo del gobernador se redondea con la aseveración de que la presidenta instruyo a ambos secretarios para que estén al pendiente, vigilen y operen para generar los resultados.
La noticia es buena para los sinaloenses, pero amarga. Todo eso que hoy se nos ha dicho, ya se ha hecho en otros momentos, y aquí seguimos.
LA DESCUENIZACIÓN
Que el gobernador volviese triunfal a la Universidad Autónoma de Sinaloa no es extraño. Desde que se desistieron o casi las acusaciones contra la burbuja universitaria, se perfilaron acuerdos que permitieron la reelección sin problemas del rector Jesús Madueña Molina.
Pero al dar a conocer a su nuevo gabinete, el propio rector reveló el alcance de esos acuerdos.
Lo más sorpresivo por supuesto, fue la aparición del exdiputado Sergio Mario Arredondo Salas como director Académico. En condiciones normales, tendría que verse con absoluta normalidad, pues se trata de un profesionista serio, preparado, con experiencia en el ramo de la academia (recientemente fue director de Cobaes) y viene precedido de una merecida buena fama.
El asunto es que Arredondo fue, como diputado presidente de la Comisión de Fiscalización, un verdadero cuchillo de palo en la indagación sobre irregularidades en los manejos financieros de la UAS, así como un impulsor de la nueva Ley Orgánica, que tanto indignó al gobierno uaseño. En represalia, la administración de Madueña lo despojó de su plaza como maestro, y lanzó toda una campaña de desprestigio que no funcionó, pero mostró cómo se procesan las animadversiones.
Hoy es parte muy importante del equipo gobernante. Veremos si los resabios le permiten funcionar o si se le mantendrá bajo una guerra de mediana intensidad.
Pero también hay ausencias importantes. Arnoldo Valle, por ejemplo, era un elemento muy cercano a Héctor Melesio Cuén Ojeda, y así permaneció pese a los escándalos en que se vio envuelto, entre ellos una persecución a mano armada dentro del campus universitario, de la que afortunadamente salió bien librado.
Valle fue ejecutor político de muchas de las consignas combatientes de parte del grupo de Cuén, y también fue ejecutor de las venganzas internas. Muchos cuenistas fueron desplazados y enviados al ostracismo en acciones cuya paternidad se atribuyó frecuentemente al vocero oficial de la institución, que simplemente ya desapareció.
A la vista de estos acuerdos, no es aventurado pronosticar que para las elecciones del 2027, el PAS volverá a convertirse en un aliado-satélite de Morena. Ya se sabe que su peso electoral es poco, pero con el desgaste que ha sufrido el gobierno a partir de la lucha interna del cártel, y con la rebelión medio velada que ya viven los partidos comparsa -PT y PVEM-, cualquier apoyo adicional será bienvenido, aunque sea para ponerlo como parapeto en el regateo con los aún aliados.
Eso, opinan los especialistas, mientras se concreta el destino previsible de ese partido, que es la desaparición.
UNA VICEFISCALÍA
ESPECIALIZADA
Después de una morosidad inexplicable -porque había línea de arriba- el Congreso del Estado aprobó unánimemente la creación de una Fiscalía Especializada en atención a casos de periodistas y defensores de los derechos humanos.
En términos formales, es una buena medida. El gremio de la comunicación y el conglomerado de quienes luchan por los demás, tienen ahora una instancia a qué acudir en la búsqueda de justicia.
Pro en la práctica, la creación de esta dependencia implica un reconocimiento de que no hay capacidad para garantizar esa justicia por las vías normales, como no la hay para las personas sin tribuna ni caja de resonancia que todos los días son víctimas de agresiones, asaltos, levantones y en casos extremos, asesinatos.
Me parece que para lo esencial, que es la preservación de las vidas de ambos grupos sociales, para la prevención de los desaguisados que nos tienen como uno de los países más peligrosos del mundo, no alcanzará el intento. Es como esperar que por la aprobación de la ley que castiga el uso de los ponchallantas, las avenidas y carreteras de Sinaloa ya quedaron salvadas de ese tipo de agresiones.
Ojalá estemos equivocados, que esta muestra de voluntad política traiga los resultados necesarios. Por razones naturales, nos daría mucho gusto.