El Pil Tostado, adiós a una época; Claudia sigue como AMLO; no pelan al turismo
FRANCISCO CHIQUETE
Este sábado falleció el exalcalde José Luis Tostado Sánchez. Uno de los últimos personajes que llegó a la alcaldía y salió de ella sin conflictos ni polémicas. Con él termina toda una época de la política local, en que el humanismo estaba por encima de los intereses.
Al Pil, como le conocíamos todos, le tocó un periodo turbulento: sustituir a un alcalde intenso como José Ángel Pescador, enfrentar las críticas despiadadas de una representación empresarial desbordada, sortear los efectos de un experimento político nacional, como fue la concerta-cesión con el PAN, que con una modesta alcaldía como la mazatleca, selló la alianza PAN-Salinas tras el fraude presidencial de 1988.
El día que Pil rindió su informe, al gobernador Francisco Labastida le recomendaron no asistir para evitar el ambiente hostil que se había generado tras el acuerdo señalado. El alcalde sustituto logró por sí mismo un acto tranquilo, civilizado y participativo, con el Teatro Ángela Peralta lleno.
A diferencia de los grandes saraos tradicionales en la política, festejó con una pequeña reunión en que estuvieron don Sergio Orozco, representante del gobernador, sus amigos personales Melesio Gaxiola, con quien mantuvo una hermandad de toda la vida, Heriberto Galindo Quiñonez, a quien siguió política y afectuosamente todo el tiempo, y sus respectivas esposas. Ni acarreos ni tortas con refresco ni nada que utilizara a la gente humilde, como se acostumbra.
Muchas veces salía de importantes reuniones en el Cabildo o en el despacho de la alcaldía y antes de meterse en una reunión sobre proyectos, inversiones o programas multisectoriales, hacía un alto en el supermercado que tenía sobre la avenida Camarón Sábalo y personalmente descargaba la mercancía requerida en el negocio.
Fue un hombre sencillo, generoso, que no se metió en controversias ni en negocios turbios. Hasta las bromas llegaba a rechazar, insubordinándose a la jerarquía política. Un día salía de las reuniones de una gira estatal, cuando en los pasillos de la flamante torre del Moro oyó a un alto funcionario que le pedía -¡Ahí te encargo una muchacha! Luego se entreabrió otra puerta de la que salió una risa festiva, la del más alto funcionario ¡y otra para mi!
Tostado se detuvo, puso los brazos en jarras y les respondió “¡Cabrones! No las consigo para mi, las voy a andar consiguiendo para ustedes…
Fue una gran persona y un gran personaje.
NO CAMBIA NADA
Muchos, dentro y fiera de la cuarta transformación, esperaban que el Presupuesto de Egresos de la Federación 2025 diera luces sobre las verdaderas ideas y proyectos de la presidenta Claudia Sheinbaum, más allá de las herencias que debiera respetar, pero no ha habido absolutamente ninguna diferencia.
Aún con la economía gubernamental destrozada y comprometida, siguen apareciendo partidas para el Tren Maya, para la refinería de Dos Bocas y para cuanta desmesura se emprendió en el sexenio pasado, sin olvidarse de las aportaciones propias a un costo exorbitante de los llamados programas sociales, cuya mayor efectividad se ha probado en el ramo electoral.
Por error, se dijo, en la versión original del proyecto presupuestal se redujeron las partidas correspondientes a la UNAM y la UAM, pero se duplicaron los recursos para las Universidades “Benito Juárez”, proyecto patito del que prácticamente no han egresado alumnos, o no lo han hecho en regla, y donde ha habido quejas y denuncias por irregularidades administrativas que afectan lo mismo al estudiantado que a la planta magisterial, pero se sostienen porque el proyecto inició con el patriarca. Ni qué abindar sobre los recortes a salud, seguridad y educación.
Por supuesto, es absurdo creer que la presidenta se va a pelear con quien la condujo hasta su puesto actual, pero se había mantenido la creencia de que el poder se ejerce sin compartirlo. Es que además de las obligaciones contraídas, del agradecimiento natural, hay una gran afinidad ideológica,
aunque López Obrador haya sido formado en las sinuosas reglas del priísmo tradicional, y Claudia Sheinbaum en las de la grilla universitaria y la militancia en la ortodoxia izquierdista.
Con todo, es una gran prueba. Las estructuras morenistas están enfocadas a la consolidación del proyecto obradorista (ya el junior Andrés Manuel López Beltrán hace giras nacionales llamando a defender la herencia de su padre), mientras la realidad económica se impone. Apostar por ejemplo a un crecimiento económico de 2 o 3 por ciento para el año próximo, cuando todo indica que en el mejor de los casos llegaríamos a la mitad, equivale a pensar en que para salir de nuestras deudas nos vamos a sacar diez veces consecutivas el premio mayor de la lotería.
LA ELECCIÓN JUDICIAL,
SOBRE TODAS LAS COSAS
Puede el mundo rodar sobre montes espinosos. Al gobierno y su coalición no les preocupa nada, como no sea la elección para renovar el Poder Judicial en los términos y condiciones que se ordenaron desde Palacio Nacional el cinco de febrero del año pasado (en el gobierno pasado).
Para que no quede duda de que el diseño es inconmovible, la presidenta ya le dijo al INE que el presupuesto solicitado para realizar la elección es muy alto, que la pueden hacer con mucho menos; ya los voceros presidenciales en el Congreso advirtieron que tampoco se pueden conceder los tres meses de prórroga que solicita el propio INE.
Cuando López Obrador se mandó a hacer su particular consulta de revocación de mandato, irritado por la baja participación, culpó al INE por no haber instalado todas las casillas electorales y lo acusó de boicotear el ejercicio, pese a que tampoco les autorizaron los recursos necesarios. El INE de entonces aguantó vara y defendió su posición, a diferencia del INE de hoy, que pide un presupuesto y acepta sumiso cualquier reducción, por muy arbitraria que sea; que pide una prórroga por razones eminentemente técnicas, y acepta que lo bateen por causas eminentemente políticas. Aquí también va un mensaje importante que ya muchos militantes han presumido con soberbia: “¿no que el INE no se toca?”
Hacer la caprichosa elección de jueces, magistrados y ministros es igual de ruinosa en septiembre que en junio, pero hay un principio de autoridad (autoritarismo) que viene desde el fondo de la cuarta.
En eso está enfrascado el gobierno, mientras el mundo gira en derredor con sus propias exigencias. Ya no sólo enfrentamos las barbaridades de Donald Trump, cuyas amenazas, está demostrado, no son sólo discurso de campaña electoral. Ahora también nos topamos con una actitud belicosa de Canadá, cuyos gobernantes encuentran mal las decisiones que se han tomado aquí y las orientaciones que lleva el país.
Tiene razón la presidenta: México es un país soberano y puede decidir por si mismo cuál es el rumbo que sigue, nomás que en eso nos va también la viabilidad económica inmediata, y no se ve que el gobierno tenga una propuesta alterna viable, que sustente la defensa nacional en los términos acordados en el tratado comercial que tanto impulsó YSQ.
(Una advertencia para la masa electoral que restauró el régimen de partido hegemónico: si se caen las condiciones económicas tenidas hasta ahora, con todo y su desigualdad y su cauda de injusticias, no será posible sostener el andamiaje de dádivas y compras de voluntades que hoy se llama “programas sociales”.
LAS GRANDES DECISIONES
En el sexenio de José López Portillo se empezó a explorar la aplicación del Derecho a la Información, cuyo rango constitucional era letra muerta. Después de un intenso debate nacional, el presidente concluyó que “no le encontramos la cuadratura al círculo” y no hubo manera de llevarlo a la práctica.
Fueron inagotables las protestas y denuncias de la izquierda, que exigía una apertura gubernamental a la mirada de la sociedad. Esa izquierda estuvo empujando durante los años siguientes, hasta que se crearon las Leyes de Acceso a la Información Pública y los mecanismos e instituciones que permitían acceder al ejercicio de ese derecho.
Esta semana, los activistas de izquierda que sobrevivieron a esa lucha, aplauden la desaparición del INAI y festejan que el estado asume las
funciones de “garante del acceso a la información”, justo cuando todo lo referente al manejo del dinero oficial fue reservado “por seguridad nacional”.
Dos próceres cuatroteístas de cepa, lo explican: el INAI era un poder paralelo al servicio de la oligarquía, dijo Leonel Godoy. Lo que quieren es tener ese poder para seguir mintiéndole al pueblo, dijo el gran filósofo Gerardo Fernández Noroña. En el fondo revelan su realidad. Lo que se concibió como un derecho de la sociedad, para ellos es pate del poder que no pueden compartir con nadie, aunque se trate de la sociedad a la que dicen defender.
El gran error de Felipe Calderón, el villano reventón de este régimen, fue lanzar la guerra contra el narco sin saber a qué se enfrentaba, pensando que el estado en automático podría ganar la lucha independientemente de qué armas portaran los de enfrente.
Ese tropiezo se repite en el caso de Sinaloa. Ya llegó también la Marina Armada de México, como habían llegado los Rambos del ejército, los contingentes de la Guardia Nacional y las asignaciones normales de la propia Sedena, y no pasa nada. Los delincuentes siguen matando a quien quieren matar y llevándose entre las patas a ciudadanos inocentes.
En la semana, por iniciativa ciudadana encabezada por el chef Miguel Taniyama, Culiacán do una muestra de entereza y solidaridad, con miles de personas desafiando al miedo para comprar un aguachile masivo con que se apoyó económicamente a los meseros y músicos que se han quedado sin sustento porque la guerra del cártel ha paralizado a muchas actividades económicas.
Pero al otro día la delincuencia fue y mató en un restaurante a un exjefe policíaco y a dos “víctimas colaterales”, además de la cuota diaria de levantones y asesinatos a domicilio.
Es cierto que ya no se ven tan pelones los abrazos y no balazos, pero la tan presumida inteligencia policíaca no llega a dar resultados, por más que la autoridad garantice con su palabra que ya hay tranquilidad.
A propósito de iniciativas ciudadanas, el empresario Ernesto Coppel Kelly donará una tonelada de frijol para los músicos afectados por la falta de chamba, mientras que el rey de la banda, Julio Preciado, anuncia su donación de una tonelada de arroz. Sn acciones valiosas que deben replicarse, aunque en el fondo lo principal es que finalmente le encuentren la solución al gravísimo problema que vivimos y que se extiende por casi todo el país.
COPPEL EXIGE PROMOCIÓN
A propósito del presidente de la cadena hotelera Pueblo Bonito: la de Ernesto Coppel Kelly fue la única voz que se alzó contra el abandono a la actividad turística. Nuevamente el presupuesto federal viene sin considerar los apoyos a la actividad turística, precisamente en momentos en que más se necesita la promoción de la Marca México.
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