Es parte de la depuración entre quienes no
pasaron el examen de control y confianza;
operaban en Mazatlán, Cosalá y Escuinapa
Trece agentes del Ministerio Público de la zona sur del estado fueron dados de baja como parte de la depuración que se realiza en las fuerzas policíacas. Este paquete de servidores públicos forma parte del grupo que no superó los exámenes de control de confianza aplicado por las autoridades federales de seguridad.
La depuración quita a la Subprocuraduría de Justicia de la Zona Sur del estado casi una cuarta parte de sus fiscales, aunque hay confianza en que esta carencia podrá ser superada en el transcurso de la próxima semana, sin que se produzca una parálisis en las agencias afectadas.
El gobernador Mario López Valdez, interrogado sobre el tema, lamentó tener que tomar decisiones de esa naturaleza, pero indicó que se trata de un imperativo legal. Yo soy el primero en defender a los policías sinaloenses, el sábado, cuando se vencía el plazo para hacer la depuración, estuvo hora y media con el secretario de Gobernación reflexionando sobre el impacto de enviar a la calle no sólo a cuarenta y cuatro mil policías, sino a cuarenta y cuatro mil jefes de familia,indicó.
Ofreció que habrá alternativas para ellos: prejubilaciones, jubilaciones, o medias jubilaciones para quienes tengan la antigüedad suficiente, así como capacitación y financiamiento para los que tengan interés en establecer algún negocio para que puedan seguir con sus vidas sin sufrir el perjuicio de haber perdido el empleo.
Los agentes del ministerio público despedidos estaban asignados a las plazas de Cosalá, Mazatlán y Escuinapa.
