La Procuraduría de la Ciudad de México junto con la Guardia Nacional llevaron a cabo la investigación para desmantelar una red de trata de personas que operaba ingresando mujeres provenientes de Brasil y Colombia y las extorsionaba.
Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), refirió que esta instancia dio seguimiento a los recursos que generaban las transacciones de dinero por los servicios que prestaban las víctimas.
“Las víctimas eran exhibidas semidesnudas en páginas de Internet, quienes ingresaban lícitamente al país”, explicó al señalar que después el grupo delictivo las extorsionaba pues ellas cobraban en efectivo y trasladaban el dinero a «empresas fachada», que pagaban sueldos y salarios de los tratantes y de quienes se encargaban de la seguridad de las víctimas.
El funcionario de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) indicó que había tres órdenes de aprehensión y se realizó el trabajo conjunto entre la UIF, el Gobierno de la Ciudad de México y la Guardia Nacional.
“Entre 2001 y 2017 este grupo delictivo tenía mil mujeres a quienes estaba violando sus derechos a través de la trata de personas”, finalizó Nieto Castillo.
Fuente: Excelsior