*Historia real en Villa Unión
*Testimonios de los involucrados
Entre chistes y bromas, la historia resultó real en Villa Unión, sindicatura de Mazatlán, es la del “Club de los Pájaros Caídos”. Todo empezó esta mañana entre risas de amigos sobre los “pájaros muertos” de Villa Unión, allí en el parque principal y frente a la Iglesia local.
El reportero volteó hacia las copas de los árboles, al cielo, entre los arbustos cercanos buscando algún pájaro o ave muerta a pedradas o por algún veneno, pero solo las risas de los lugareños se escucharon.
“No’mbre, de esos pájaros no; de los otros, de los que cuelgan, acá abajo del cinturón”, exclamó con más burla mi interlocutor.
Ante la ironía le dije, cuénteme:
“Lo que sucede es que después de las dos de la tarde, pero sobre todo en quincenas y primeros de mes, cuando llegan las pensiones de los viejitos, de esos de los 70 y más, se vienen unos 40 y hasta 50 viejos, arrugados, cansados, con bordones, pero con su pensión en la bolsa y aquí, llegan hasta de los ranchos vecinos algunas mujeres que se los llevan a los hoteles cercanos en donde por simples caricias o nada más por ver, los viejitos les entregan parte de sus pocos dineros…”
La mayoría de los adultos son, viejitos, que “no paraguas y de ahí el Club de los Pájaros Caídos o Muertos que no se levantan ni para orinar”, enfatizó el improvisado cronista rural.
Así, nos dimos a la tarea de verificar esta anécdota que resultó cierta; una historia real en Villa Unión y aquí les ofrecemos estos testimoniales como parte de nuestra cultura y picaresca mazatleca.
