“Nos fuimos a dormir trabajando para el mejor estudio de cine y nos despertamos para descubrir que trabajábamos para el peor servicio de ‘streaming”, dice Christopher Nolan
La estrategia, después de incontables atrasos y aplazamientos de estrenos, ha sacudido a los cines y afecta a proyectos de gran presupuesto como la nueva Dune, la cuarta entrega de Matrix, Godzilla contra Kong y El escuadrón suicida. “Es muy, muy, muy, muy caótico. Va de cómo tratas a los cineastas, a las estrellas y a las personas que han dado mucho por estos proyectos. Merecían que se les consultara y se les hablara sobre lo que iba a pasar con su trabajo”, añadió.
Curiosamente, quien no protestó en su momento fue el equipo de Wonder Woman 1984, de la que ya hace tiempo se sabía iría a salas y HBO Max en EE UU el 25 de diciembre. The New York Times desvela que Warner habló con la directora Patty Jenkins y la actriz Gal Gadot sobre este movimiento, y que además recibieron 10 millones de dólares, cada una, como retribución: hay una nueva secuela en ciernes y es mejor no molestarlas.
Sobre Tenet hay disparidad de opiniones acerca de su carrera comercial. En EE UU, donde casi todas las salas estaban cerradas, solo recaudó 57,4 millones de dólares; en cambio, en el resto del mundo superó los 300 millones. Warner ha decidido cambiar de estrategia, y en ese movimiento ha arrastrado a otras productoras, como Legendary Entertainment, que financió el rodaje de Dune y que estudia presentar una demanda contra los estudios porque no participó en la decisión. Según Variety, el director de Dune, Denis Villeneuve —otro peso pesado de la industria— también está “decepcionado” con la estrategia de los estudios de Hollywood y prefiere un lanzamiento tradicional. Legendary está detrás de Dune (con un presupuesto de 175 millones de dólares, y de Godzilla contra Kong (160 millones), y según esta última publicación, estaría negociando un acuerdo más generoso con Warner por los cambios en la distribución que si no llega a buen término podría materializarse en una demanda esta semana. En cuanto a James Gunn, director de Escuadrón suicida, también ha manifestado su enfado. De fondo, como subraya The New York Times, está el dinero: muchas estrellas —por ejemplo, el reparto de Dune— han firmado contratos menos suculentos a cambio de un porcentaje de la taquilla… una recaudación en salas que ahora será más baja con el estreno simultáneo en HBO Max. A ellos también habrá que compensarles.
Información por EL PAÍS