*También muchas esquinas del Centro Histórico
*Calles imposibles de subir por altura de banquetas
A pesar de que las leyes y reglamentos urbanos exigen a los gobiernos y a los particulares crear, colocar y rehabilitar rampas para personas con capacidades diferentes, principalmente las que se transportan en sillas de ruedas, con bastones o andaderas, algunos puntos del puerto mazatleco adolecen de esas zonas de ayuda a la gente vulnerable.
Pero llama más la atención cuando la autoridad correspondiente o el particular viven en pleno centro de la ciudad y se hace no necesario, sino urgente que se coloquen rampas de apoyo. Sinaloa en Línea hizo el recorrido por algunas calles del Centro Histórico de la ciudad y se encontró que en buena parte de esas rúas no existen las rampas y, en otras calles, hasta para las personas que no usan sillas de ruedas, les es difícil subir una banqueta que se convierte prácticamente en inaccesible por la altura de la misma.
¡Pero el colmo! Es cuando en nuestra hermosa Catedral, además tener banqueta alta, no existe en dos de sus cuatro esquinas, rampas para las personas con problemas físicos, las esquinas que no cuentan son la de Benito Juarez con Canizalez y 21 de Marzo.
El alcalde Carlos Felton y su esposa, Sylvia Treviño, presidenta del DIF, se caracterizan por su donde gente y altruismo, pero como autoridad algo tendrán que hacer para ayudar a resolver esa situación, ya que muchas familias acuden a la Catedral a dar gracias por los enfermos y llevan a sus seres queridos a agradecer, en sus casos, los favores concedidos.
Lo extraño es que los propios párrocos y autoridades eclesiales tampoco hayan hecho nada, hasta el momento, para atender ese problema en favor de las personas de capacidades diferentes. Ahí lo dejamos como una inquietud y una reflexión para ayudar a nuestros semejantes.