*Se prepara de muchas maneras
*Se cotiza bien en el mercado
Los mares de México y no podían faltar las oceánicas aguas de Mazatlán que son infinitamente nobles y basta con echar las redes, el chinchorro, la tarraya o el anzuelo para traer un producto del mar que, preparado de cien maneras, es la delicia de los paladares.
Aquí, nuestro amigo Jaime Beltrán Castro, nos explica cómo se logra capturar el caracol burro, como sacarle la carne a la concha, como hervirlo y prepararlo al gusto con verduras, en una campechana o simplemente en rebanadas como si fueran callos de hacha con limón, sal y una ambarina bien helada por supuesto.
Ello son expertos pescadores y abren la concha para sacar la comida, luego le quitan un “hueso” final, lo abren a la mitad y le sacan una tripita para que no se amargue a la hora de comer y eso es todo…directo a la boca.
El caracol burro es un molusco y como tal una delicia mazatleca que llega a costaren el mercado de 100 a 140 pesos el kilogramo, aunque luego escasea y se encarece como todo producto marino.
La concha puede venderse una vez que se limpia; algunos artesanos hacen maravillas con esas cavidades que las transforman en diferentes cosas para que el turista nacional e internacional se las lleve de recuerdo.