El Gobierno de Biden ha comenzado a deportar a los más de 13,000 migrantes, en su mayoría haitianos, que han llegado en los últimos días a la ciudad de Del Río, Texas.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió este martes que pondrá “bajo control” la situación en la frontera con México, que han cruzado en los últimos días miles de migrantes, en su mayoría haitianos.
“Lo pondremos bajo control”, dijo Biden en una breve declaración a la prensa al abandonar la sede de Naciones Unidas, después de dar su primer discurso como presidente ante la Asamblea General de la ONU.
El presidente replicó así a una pregunta sobre su reacción a las imágenes de la situación en la frontera, y no está claro si su respuesta se refería al volumen de inmigrantes que se han congregado en la zona o a las fotografías sobre cómo les han tratado los agentes de la Patrulla Fronteriza.
Una de esas fotografías muestra a un agente blanco de la Patrulla Fronteriza subido a un caballo que agarra de la camiseta a un inmigrante negro, mientras aparentemente le golpea con lo que parece un látigo, en la orilla estadounidense del Río Bravo, que separa ese país de México.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, tachó este lunes de “horrible” ese trato de los migrantes y afirmó que, si se confirma que los agentes llevaban látigos y golpearon a los indocumentados con ellos, “por supuesto que nunca deberían poder volver a hacerlo”.
Y la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, aseguró este martes a periodistas que le pareció “horrible” ver “cómo trataban a esos seres humanos” los agentes de la Patrulla Fronteriza, y que se está investigando el tema.
No obstante, el Gobierno de Biden ha comenzado a deportar a los más de 13,000 migrantes, en su mayoría haitianos, que han llegado en los últimos días a la ciudad de Del Río, Texas, y ha defendido que este “no es el momento” para que lleguen a Estados Unidos.
El líder de la mayoría demócrata en el Senado de Estados Unidos, Chuck Schumer, criticó duramente este martes la decisión de Biden de deportar masivamente a los migrantes a Haití, sumido en una crisis tras el magnicidio y terremoto de los últimos meses.
“Urjo al presidente Biden y al secretario (de Seguridad Nacional, Alejandro) Mayorkas, a que pongan fin inmediatamente a estas expulsiones y a la política del Título 42 en la frontera sur”, afirmó Schumer durante un discurso en el pleno del Senado.
El senador se refería a una política amparada en la pandemia y conocida como Título 42 por la que Estados Unidos deporta automáticamente a la mayoría de los inmigrantes indocumentados que llegan a su frontera sur, sin darles la oportunidad de solicitar asilo.
“No podemos seguir con estas políticas llenas de odio y xenofobia, (propias del expresidente Donald) Trump, que desdeñan nuestras leyes sobre refugiados”, clamó Schumer.
Líder demócrata en el Senado pide frenar la deportación de haitianos
El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, fustigó al Gobierno del presidente Joe Biden por ordenar la deportación masiva de los inmigrantes haitianos retenidos en la frontera con México y pidió acabar con las políticas de “odio y xenofobia”.
“Urjo al presidente Biden y al secretario (de Seguridad Nacional, Alejandro) Mayorkas, a que pongan fin inmediatamente a estas expulsiones y a la política del Título 42 en la frontera sur”, afirmó Schumer durante un discurso en el pleno del Senado.
El senador se refería a una política amparada en la pandemia y conocida como Título 42 por la que Estados Unidos deporta automáticamente a la mayoría de los inmigrantes indocumentados que llegan a su frontera sur, sin darles la oportunidad de solicitar asilo.
“No podemos seguir con estas políticas llenas de odio y xenofobia, (propias del expresidente Donald) Trump, que desdeñan nuestras leyes sobre refugiados”, clamó el senador.
Schumer, del mismo partido del presidente Biden, dijo tener información de que hay cuatro vuelos programados para deportar a estos migrantes y se quejó de que serán enviados “a un país que no puede recibirlos”.
“Tal decisión desafía el sentido común. Y desafía también la decencia”, puntualizó.
Haití, considerado el país más pobre de América, afronta una profunda crisis política y social que se ha visto agudizada en los últimos meses por el terremoto del pasado 15 de agosto, que causó más de 2,200 muertos y cuantiosas pérdidas materiales, y el asesinato, el 7 de julio, del presidente de esa nación, Jovenel Moise.