*Proponen un parque lineal como medida integral y sustentable
*”Destruir el manglar agrava inundaciones”
En un nuevo encuentro por la defensa del manglar del Arroyo Jabalines, colectivos ambientalistas plantearon propuestas integrales para atender el problema de inundaciones en Mazatlán, poniendo como eje central la conservación de la naturaleza.
Luis Alberto Bojórquez, director de programas de Conselva, Costas y Comunidades, señaló que el error histórico ha sido pensar que talar o podar el manglar ayuda a resolver las inundaciones, cuando en realidad esto ha agravado la situación.
“Lo primero que tenemos que hacer como sociedad y funcionarios es un cambio de chip, la percepción de que el manglar provoca inundaciones es errónea, la comunidad científica internacional ya lo ha demostrado, destruirlo nos ha dejado más vulnerables”, afirmó.
Asimismo, recordó que en Mazatlán más de 102 mil personas de 289 colonias resultan afectadas cada año por distintos niveles de inundación, en zonas como el Arroyo Jabalines, el estero Infiernillo y el estero de Urías, que históricamente han sido humedales.
El especialista explicó que el agua “tiene memoria” y siempre busca regresar a las zonas que naturalmente se inundaban, por lo que insistió en que las soluciones deben ser integrales y sostenibles.
Entre las propuestas planteadas destacó; Obras de conservación de suelo en las cuencas que alimentan al arroyo, con el fin de reducir la velocidad del agua y la cantidad de sedimentos que llegan a la ciudad; Medidas para manejar el agua pluvial dentro de la ciudad, pues gran parte de las inundaciones son consecuencia del desbordamiento de ríos y arroyos.
Así como también el desarrollo de un parque lineal basado en la naturaleza, proyecto que ya cuenta con un estudio ejecutivo y que permitiría mitigar riesgos al tiempo que genera espacios públicos para la ciudadanía.
Además, subrayó que no se trata de una obra aislada ni de rescatar únicamente un parque, sino de impulsar un plan integral a nivel ciudad, donde la naturaleza se convierta en aliada y no en obstáculo.
“Tenemos que impulsar que este tipo de proyectos que retoman el conocimiento que nos da la naturaleza se incorporen en la política pública. Mazatlán necesita un programa municipal de cambio climático, actualizar el programa de protección al medio ambiente y contar con un ordenamiento ecológico local, porque hoy no existe”, agregó.